Edwin Markham

"Burlado" por Edwin Markam

Dibujó un círculo para afuera dejarme-
Hereje, rebelde, así de mi mofarse.
Pero el Amor y yo con ingenio ganamos:
dibujamos un círculo y lo atrapamos!

jueves, 5 de octubre de 2017

Hogar del corazón

Mi corazón encontró su hogar hace mucho tiempo en la belleza, misterio, ordén y desorden de la tierra en flor.
 Mrs. Lady Bird Johnson:



miércoles, 4 de octubre de 2017

Cuatro Pilares de la Resiliencia por Lindsey Frye

Esta semana, nos toca enseñar un curso en el Seminario Intercultural Mayense con el titulo, “Luto, Dignidad y Resiliencia.” Como la mayoria de lxs estudiantes hablan Tsotsil como su primer idioma, el gran desafío es entendernos unxs a lxs otrxs. Suele haber muchos discusiones entre el Tsotsil y el Español hasta que todxs están satisfechxs que se ha definido y entendido bien. Nos ayuda como facilitadoras porque así llegamos a las raices de las palabras y la profundidad de la experiencia humana que intentamos expresar. 
La primera noche, trabajamos con el termino “resiliencia.” Aqui en los altos de Chiapas, la palabra resistencia es muy común y visto como un atributo noble (especialmente entre los pueblos indigenas). Me preguntaron si la resiliencia es lo mismo que la resistencia. Para contestarles, les dimos a cada persona un elastico ancho y grande, con la indicación que jugaran con ella, usandola para estirar los brazos, las piernas, la cintura.

“Qué pasa cuando deja de estirar su elastico?” les pregunto. “Pues, vuelve a su lugar, mas o menos como era antes,” me contesta un joven. “Y así es la resiliencia,” les dije. “En cambio, esta mesa grande es resistente. Quizas yo podría pararme en ella y resista mi peso. Pero si un elefante la pisa, seguro que se quiebra.”

Ahorita, en estos momentos vulnerables que estamos viviendo en México y en muchos lugares en el mundo, les propongo que nos dedicaramos a construir la resiliencia. Para hacerlo, mi colega, Elena Huegel, propone 4 pilares que nos ayuda a fortalecer la resliencia.* Aqui se les comparto, agregando mi experiencia con ellas en familia en el ultimo mes.

1. Rutina: “Mantenga una rutina diaria, aunque tenga ​que inventar una rutina diferente a la usual.”* En mi familia, siempre tenemos una rutina para acostar a las niñas en la noche. Les cepillamos los dientes, les leemos un cuento, les llevamos como caballos a la cama, les cantamos y oramos. Es la rutina basica, y creo que les ayuda a prepararse para descansar. Pero en esta semana que estoy fuera (precisamente para enseñar este curso), la extraño a esta rutina y me doy cuenta que a mí también me prepara para descansar.

2. Momentos espirituales: “Incluya pequeños momentos espirituales durante el dia.”* La mañana despues de que vivimos el temblor, mis hijas se despertaron gritando. Fue algo tan raro, porque normalmente se despiertan muy felices, llenas de energia para un dia nuevo. Nos daba el señal de que necesitaban más atención, más contacto fisico y más momentos espirituales para poder volver a sentirse seguras. A veces paramos y respiramos profundos. Otras veces, me piden si puedo orar por ellas y el dolor que sienten en su estómago.

3. Peronas: “Tómase el tiempo para jugar, conversar o simplemente estar con otros.”* Para celebrar mi cumpleaños este mes, decidí que en vez de invitar a todo el mundo a mi casa, sólo quería pasar tiempo con mi familia y unas amigas cercanas. Es un poco anormal para mi, pero me di cuenta que es importante poder hablar de cosas profundas, que nos tocan hasta el fondo del corazon, y para eso, necesitamos momentos intimos con personas cercanas.

4. Lugares: “Visite los lugares que le reconfortan o le renuevan.”* El espacio más especial para nosotrxs como familia es el patio de la casa. Alli jugamos, bailamos y observamos la naturaleza. A veces nos visita un colibri, y nos reimos al ver sus alas tan velozes que le ayuda a tomar nectar de las flores.

Les comparto esta foto de un muro que se calló cerca de la oficina donde trabajo. Me ayuda un poco expresar lo que pasó a nuestro interior al vivir un terremoto. Todo está movido. Hay partes que ya no sirven mas. Nos sentimos vulnerables y necesitamos un apoyo interior, como el palo está apoyando a la pared. La resiliencia se construye en el camino, y las practicas diarias son los pilares que se va sostentiendo el proceso. Espero que esto les haya ayudado y les deseo a todxs un buen camino.

*Tomado y adaptado con material del Instituto Brookfield y “Con Esperanza y Valiente: Imágenes de la naturaleza para la sanidad de traumas en niños y niñas.” por Elena Huegel, documento no publicado, 2013.